Alabé sus ojos, sus labios y sus manos. Recité a los poetas de la seducción. "...Tus muslos para ser acariciados como un recuerdo pensativo..." ... Y parece que un beso te cerrara la boca..." Entregué flores y joyas. Utilicé las técnicas amatorias de Casanova. Perfeccioné las posiciones del Kama Sutra y otros libros orientales. Me preocupé por sus necesidades, me interesé genuinamente por sus afectos y sus cariños. Le escribí un soneto basado en el "amor es un perro infernal". Le compuse un blues llamado "Crisis subjetiva" con solo de armónica incluido. Use un anillo para ella. Le demostré mi amor aventando mi gabardina favorita a las vías metro y luego bajando por ella. Me hice un tatuaje con su nombre... y no es un nombre corto.
Le dije que la quería mas que a Dios.
Ayune siete días, velé diez noches. Recogí mi lágrimas en un garrafón de electropura. Fumé hasta pasto, bebí incluso perfume.... y ella...
Se fue con el primer pendejo que se encontró. Con un animal cuyo mejor halago que le ha hecho a una mujer es: "mamacitaestasrebuena". Con un simio que le eructa en la cara antes de tomarla y sus líneas para conquistarla fueron "Te subo, te encuero y te echo al plato".
Fue mejor que la que me dejó por otra
